Las tarjetas que presentan situaciones y requieren que los niños identifiquen las emociones ayudan a desarrollar la inteligencia emocional. Fomentan la empatía, al hacer que los niños se pongan en el lugar de los demás, y mejoran su capacidad para reconocer y expresar emociones. También fortalecen la comprensión social, al vincular situaciones específicas con las emociones que estas generan. Además, amplían el vocabulario emocional, ayudando a los niños a identificar y nombrar sentimientos como alegría, tristeza, miedo o enojo.
Edad recomendada: Estas tarjetas son ideales para niños de 4 a 8 años, ya que en esta etapa están aprendiendo a identificar y regular sus propias emociones, así como a comprender las de los demás. Pueden usarse tanto en el hogar como en contextos educativos o terapéuticos.
Contenido: 14 tarjetas.
